lunes, 28 de julio de 2008

Colmadón y motoconcho

Hermanos:

Ayer domingo fue día del padre en dominicana y "Poema de lunes" desea felicitar a todos los padres que pertenecen a esta comunidad.

Felicidades padres. Mucha salud para todos, la familia necesita mucho de nosotros.

Durante la semana asistí al velatorio de Jacinto Amparo, un vecino de una comunidad campesina llamada María Hernandez, un pequeño poblado perteneciente a la provincia Duarte de nuestro país. La crónica la escribí en "Quijote Urbano" , el otro blog que mantengo y la dirección es http://quijoteurbano.blogspot.com/2008/07/jacinto-amparo.html.

En la crónica digo que esa población campesina es virgen aún, que no conoce el "colmadón" ni tampoco el "motoconcho"

Como esta es una comunidad de múltiples nacionalidades y algunos leerán la crónica, debo precisar ambos términos. Para los que no lean la crónica, la precisión de los términos les sirve para conocer un poco nuestra realidad.

Colmadón en Santo Domingo

En mi país a las pequeñas tiendas de comestibles o tiendas de abastos se les llama "colmado". Es palabra castellana como tienda de comestibles y también como participio del verbo "colmar". En los últimos 40 años, muchos de esos colmados han agrandado sus puertas de entrada, han colocado sillas en el interior y en las aceras y así ofrecen ahora los servicios de bar popular, con música y bebida para los parroquianos. A ese colmado-bar se le llama "colmadón".

En Santo Domingo el transporte público de pasajeros es desastroso, una verdadera verguenza. Uno de los modos de transporte que utilizamos tradicionalmente es "El Concho".

"El Concho" como modo de transporte consiste en un vehículo, normalmante de 5 pasajeros, que recorre una ruta preestablecida y que va tomando y dejando pasajeros a voluntad de ellos mismos; es decir, donde un pasajero levante una mano en señal de necesitar transporte, ahí se detiene "El Concho" a recogerlo; y donde un pasajero diga "déjame chofer", ahí se detiene "El Concho" a dejar al pasajero.

Como comprenderán, una ciudad llena de esos vehículos, deteniéndose a voluntad del pasajero, es una ciudad con un gravísimo problema de tránsito.


Belleza dominicana en motoconcho

Pues bien, a partir de los años setenta del siglo pasado, empezó a aparecer una nueva modalidad de transporte de pasajeros. Es similar al descrito anteriormente, pero el vehículo utilizado es la motocicleta y la ruta es más flexible, pudiendo en ocasiones dar servicio puerta a puerta. Básicamente transporta al pasajero desde donde lo deja "El Concho", hasta su casa y viceversa; y vino a dar respuesta a una necesidad porque los barrios marginados son de dificil acceso en vehículos de cuatro o más ruedas. Tenemos mucha gente viviendo en callejones.

A ese modo de transporte le llamamos "motoconcho".

Como pueden ver, el colmadón y el motoconcho aunque son dos invenciones muy recientes, ya tienen 40 años de vida, por eso apelé a ellos como referente de lo virgen que era la comunidad de María Hernandez, que aún no conoce el motoconcho ni el colmadón.

Bueno, ahora a lo nuestro.

Hoy les traigo a Iros (Igor René Olsen Suarez), poeta contemporáneo nacido en 1971, en Callao, Perú.

A Iros lo conocí a traves de La Tropa Cósmica, que es una suerte de hermandad de seres a quienes les gusta la obra de Silvio Rodríguez y que nos comunicamos utilizando el Internet. En los encuentros que tiene la Tropa Cósmica anualmente, he tenido la oportunidad de conocerlo personalmente, tanto a él como a Mariana Libertad, su compañera; dos amigos troperos muy queridos.

Aquí les dejo una muestra de su poesía, de su libro "Bitácora del capitán de los ojos siempre". Ya con el título me basta para declararlo poeta consumado!!!

Que tengan bonita semana.

Mario



Ella camina de siempre
(A Verónica González... mi gran amiga)


Ella camina de siempre,
de viento,
de siempre...

Ella cabellos de trigo
sonrisa de tiempo
camina de siempre
y de siempre sus ojos
su ropa
su vientre
con andares eternos
y eternos los sueños
su prisa
su lecho
sus manos abiertas
sus ojos perfectos.

Ella camina de siempre,
ella camina de Sur.


Iros






lunes, 21 de julio de 2008

El alma no envejece



Hermanos:

Estoy repleto de razones para dar gracias a Dios y lo hago, nunca tanto como debería, pero lo hago.

Una de esas razones es que tengo a mi madre viva y cercana.

Cuando digo viva quiero decir vital, llena de vida.

Es oportuno señalar que si yo tengo 52, mamá debe pasar de los 20.

Ayer me dijo que el alma no envejece y me recitó de memoria estos versos:

Es absurdo, señora, que os enojeis por eso;
yo os juro que no tiene tanta importancia un beso
para que perpetuéis esa ojera afligida
y creáis deshojada de pudor vuestra vida.

No exige el accidente replesalias ni agravios.
Un beso es una rosa que se exprime en los labios,
es como una palabra más breve y expresiva
es como una mirada más intensa y más viva;

pero que, en el armónico mecanismo social,
sólo tiene un efímero valor sentimental,
y al cabo de una charla distinguida y galante,
puede perderse un beso como se pierde un guante.

Es absurdo, señora, que os enojéis por eso.
No es grave la inquietante mordedura de un beso
y aunque inflame los labios (y el alma) su escozor,
ni se muere de pena ni aun se enferma de amor.

Pero si fue el ultraje tan ruín y tan villano
y tan grande la herida de aquel beso tan chico,
¿por qué dejasteis presa vuestra mano en mi mano
y sonreís ahora detrás del abanico?


El poema se llama Flirt y es de José Martínez Jerez, de quien no he conseguido ningún dato en Internet.

Que tengan bonita semana.

Mario

lunes, 14 de julio de 2008

Matilde

Hermanos:

Matilde era sencilla, natural, silvestre y bella.

Incapaz del asombro.

Para ella todo tenía su explicación en la naturaleza misma, así de simple.

Para nosotros, ingenieros trabajando fuera de casa y viviendo en casa de solteros, era una gran ayuda.

Nos cocinaba con amor y su menudo cuerpo se paseaba por la casa cuando hacía la limpieza o cuando nos ayudaba con la compra del super.

Su mayor desilusión había sido separarse de su esposo cinco años atrás.

Una mañana de lunes llegó Mati acompañada de una hermosa niña de unos dos años, su hija.

Al regresar del trabajo la tarde de ese lunes le pregunté con picardía: "Mati, ¿cómo es posible que tengas una niña de dos años si te separaste de tu esposo cinco años atras?"

Su respuesta silvestre aroma mi memoria.

Bajando la mirada me dijo:

"Fue que yo lo dejé queriéndolo"


Lo relatado ocurrió en Santiago de los Caballeros, al caer la tarde de un día de principios de abril de 1990 y no lo olvido.

He querido iniciar este poema de lunes con un relato como el de Matilde porque la verdad es que la economía no anda bien en estos tiempos y si ella anda mal, lo social y lo político no esperan mucho para descomponerse.

Se acercan tiempos difíciles en los que tendremos que apelar a cuanto de humanidad tengamos dentro, para dar una respuesta solidaria e incluyente, que poniendo el acento en el hombre, nos eleve a todos en dignidad conjurando la pobreza en este mundo.

Un ocurrido como el de Matilde nos ayuda a descubrirnos frágiles, humanos, capaces de la entrega por amor.

Necesitaremos de Matilde.

Ahora a lo nuestro.

Hoy les traigo a "Carito" de León Gieco, poeta y cantautor argentíno, nacido en Santa Fe, en noviembre de 1951.

Que tengan bonita semana.

Mario


Publicado en El Nacional por Pablo Mckinney
¡Gracias Pablo!










Carito


Sentado solo en un banco en la ciudad
con tu mirada recordando el litoral
tu suerte quiso estar partida
mitad verdad mitad mentira
como esperanza de los pobres prometida

Andando solo bajo la llovizna gris
fingiendo duro que tu vida fue de aquí
Por qué cambiaste un mar de gente
por donde gobierna la flor
mirá que el río nunca regaló el color

Carito, suelta tu pena
se haga diamante tu lágrima
entre mis cuerdas
Carito, suelta tu piedra
para volar como el zorzal
en primavera

En Buenos Aires los zapatos son modernos
pero no lucen como en la plaza de un pueblo
Deja que tu luz chiquitita
hable en secreto a la canción
para que te ilumine un poco más el sol

Cualquier semilla cuando es planta quiere ver
la misma estrella de aquel atardecer
que la salvó del pico agudo
refugiándola al oscuro
de la gaviota arrasadora de los surcos

Carito, yo soy tu amigo
me ofrezco árbol
para tu nido
Carito, suelta tu canto
que el abanico en mi acordeón
lo está esperando


León Gieco.

lunes, 7 de julio de 2008

Fito Páez en concierto II



Hermanos:

La que finaliza ha sido una semana intensa en noticias.

En el ámbito nacional, les comento que al acercarse el juicio político en El Senado contra los miembros de la Cámara de Cuentas de Dominicana, cinco de los nueve miembros renunciaron; más tarde, en pleno juicio, otros tres miembros renunciaron también y al final El Senado destituyó al único que no había renunciado.

Fue una victoria para la sociedad que había exigido activamente la destitución de esos funcionarios. Ganó la democracia.

En el ámbito internacional, el rescate de Ingrid Betancourt fue la noticia más importante de la semana. Las FARC parecen no darse cuenta de que han perdido la batalla política y cuando un ejercito ha perdido la batalla política es un ejercito de opresores, no de liberadores.

Poema de lunes se une al regocijo internacional por la liberación de Ingrid Betancourt.

Si la semana que recién pasada ha tenido esa intensidad, la próxima no se queda atrás. El próximo miércoles, día 9 de Julio, se celebra el día de la Independencia Argentina, el día en que los Diputados firmaron en Tucumán el Acta de Independencia Argentina.

En alguna ocasión relaté que como dominicano guardaba un agradecimiento especial por el pueblo argentino. Una suerte de respeto y admiración a ese hermano mayor que en momentos en que nuestra patria se encontraba invadida por Estados Unidos de Norteamérica, supo izar nuestra bandera y saludarla con una salva de 21 cañonazos.

Eso ocurrió el 13 de Enero de 1920, cuando el Crucero 9 de Julio de la Armada Argentina visitaba los pueblos de Centro América y El Caribe en visitas de cortesía. El protocolo mandaba que al llegar a cada país se saludara el pabellón con una salva de 21 cañonazos. Al llegar a nuestras costa y ante el dilema de a cual pabellón saludar, si al norteamericano que flameaba oficialmente desde 1916 o al dominicano que moraba en los encendidos pechos de los dominicanos; el Capitán de Fragata Francisco Antonio de la Fuente, comandante del 9 de Julio, consultó cablegráficamente y el Presidente Hipólito Yrigoyen le respondió: "Id y saludad al pabellón dominicano" y así lo hizo al entrar al puerto de Santo Domingo, ante la mirada agradecida de la población que se congregó en el puerto, desafiando el estado de sitio impuesto por los invasores norteamericanos.

Mi abuelo, que fue testigo presencial, me lo contaba y no lo olvido.

¡Felicidades argentinos!

Bien, ahora a lo nuestro.

El pasado martes asistí al concierto de Fito Páez en Santo Domingo. ¡Gran argentino!, ¡Gran concierto!

Hoy les traigo un poema de ese gran artista y el enlace a un vídeo con una canción del mismo autor.

Que tengan bonita semana.

Mario



Un vestido y un amor

Te vi…, juntabas margaritas del mantel
Ya sé que te traté bastante mal,
No se si eras un ángel o un rubí
O simplemente te vi.

Te vi…, saliste entre la gente a saludar
Los astros se rieron otra vez,
la llave de mandala se quebró
O simplemente te vi.

Todo lo que diga está de más,
Las luces siempre encienden en el alma
Y cuando me pierdo en la ciudad,
vos ya sabés comprender

Es sólo un rato no más,
Tendría que llorar o salir a matar.
Te vi, te vi, te vi…,
yo no buscaba nadie y te vi.

Te vi…, fumabas unos chinos en Madrid
Hay cosas que te ayudan a vivir
No hacías otra cosa que escribir
Y yo simplemente te vi.

Me fui..., me voy de vez en cuando a algún lugar,
Ya sé, no te hace gracia este país...
Tenías un vestido y un amor...
y yo simplemente te vi.

Todo lo que diga esta de mas,
Las luces siempre encienden en el alma
Y cuando me pierdo en la ciudad,
Vos ya sabés comprender...
es sólo un rato no más,
Tendría que llorar o salir a matar...
Te vi, te vi, te vi...
yo no buscaba nadie y te vi.



Aquí el vídeo con una hermosa canción en homenaje a las madres de la Plaza de Mayo.