domingo, 28 de abril de 2013

Lunes 29 de abril de 2013




Hermanos:

Hace cerca de 20 años, a principios de los noventas, abandoné el racionalismo porque advertí que el ser humano posee una capacidad de acceder a cierta información que nada tiene que ver con la razón. En ese proceso me ayudó mucho la poesía porque la información que me llega en un poema va mucho más allá de lo que el intelecto descifra. Lo mismo me ocurre con la música, aunque con menor intensidad y estoy seguro de que eso sucede con todas las artes, pero necesita ser ejercitado. Gracias a esa decisión me reconcilié con mi iglesia Católica de niño y aquí estoy, viviendo mi día intensamente, atento a lo que voy sintiendo y deseando dar, en cada momento, mi mejor respuesta, la que surge de mi verdad interior, la que me sopla el viento del Espíritu.

La reflexión anterior viene al caso porque en la semana estuve leyendo algunos artículos de Leonardo Boff, teólogo y filósofo brasileño que van en la misma línea y me han llenado de gozo. Dice el filósofo que la razón no es el inicio ni el fin de la existencia. Buscando los orígenes ella encuentra algo anterior a ella: El afecto. Buscando el fin ella encuentra algo posterior a ella: La espiritualidad, la conciencia de que somos parte de un todo y que culmina en la contemplación.

Entonces, sigue diciendo Boff, no es como dice Descartes, "Pienso, luego existo" sino que la sentencia sería, "Siento, luego existo". De manera que es el amor, es la pasión lo que nos mueve. Pero esa pasión vital, ese caudal de grandes aguas, necesita de límites que la encaucen. "Dejada a si misma puede degenerar en formas de gozo destructor. "Todos los valores valen, pero no todos valen para todas las circunstancias..."

Es ahí donde entra la función insustituible de la razón. Ella está llamada a poner los límites a esa pasión, pero debe ser en la justa medida:

Si la razón reprime a la pasión surge la rigidez, la tiranía del orden y la ética utilitaria.

Si la pasión desborda a la razón, "se impone el delirio de las pulsiones y la ética hedonista"

Pero si se logra la justa medida entonces surgen las dos fuerzas que sostienen la ética humanitaria: La ternura y el vigor.

"La ternura es el cuidado con el otro, el gesto amoroso que protege. El vigor es la contención sin la dominación, la dirección sin la intolerancia"

Un espacio de cielo aquí en La Tierra. Un espacio en que venga a nosotros Su Reino.

Excelente artículo. Aquí les dejo algunos enlaces con artículos de Leonardo Boff, el que he comentado es "Ética y formación de valores", pero los otros también son muy interesantes.

  1. Daimon y Ethos
  2. Ética y formación de valores.
  3. El ethos que ama.
Bien, ahora vamos a lo nuestro, pero no quiero terminar sin recordar que un 28 de abril del año 1965, cuarenta mil marines norteamericanos torcieron, para desgracia nuestra, el curso que llevaba nuestra historia. Lo hicieron mal los norteamericanos porque actuaron desde una ética utilitaria de la que no pueden surgir valores universales que promuevan la paz.

Bien, hoy les traigo a Silvio Rodríguez que se encuentra en Santo Domingo, invitado a participar en la Feria del Libro. Les comparto "La maza" y ese es el enlace a la mejor de las versiones de esa canción, con Shakira y Mercedes Sosa.

Que tengan bonita semana.

Mario



Si no creyera en la locura
de la garganta del sinsonte
si no creyera que en el monte
se esconde el trino y la pavura

si no creyera en la balanza
en la razón del equilibrio
si no creyera en el delirio
si no creyera en la esperanza

si no creyera en lo que agencio
si no creyera en mi camino
si no creyera en mi sonido
si no creyera en mi silencio

qué cosa fuera
qué cosa fuera la maza sin cantera

un amasijo hecho de cuerdas y tendones
un revoltijo de carne con madera
un instrumento sin mejores resplandores
que lucecitas montadas para escena

qué cosa fuera, corazón, qué cosa fuera
qué cosa fuera la maza sin cantera

un testaferro del traidor de los aplausos
un servidor de pasado en copa nueva
un eternizador de dioses del ocaso
júbilo hervido con trapo y lentejuela

qué cosa fuera, corazón, qué cosa fuera
qué cosa fuera la maza sin cantera

si no creyera en lo más duro
si no creyera en el deseo
si no creyera en lo que creo
si no creyera en algo puro

si no creyera en cada herida
si no creyera en la que ronde
si no creyera en lo que esconde
hacerse hermano de la vida

si no creyera en quien me escucha
si no creyera en lo que duele
si no creyera en lo que quede
si no creyera en lo que lucha

qué cosa fuera
qué cosa fuera la maza sin cantera
un amasijo hecho de cuerdas y tendones
un revoltijo de carne con madera
un instrumento sin mejores resplandores
que lucecitas montadas para escena

qué cosa fuera, corazón, qué cosa fuera
qué cosa fuera la maza sin cantera

un testaferro del traidor de los aplausos
un servidor de pasado en copa nueva
un eternizador de dioses del ocaso
júbilo hervido con trapo y lentejuela

qué cosa fuera, corazón, qué cosa fuera
qué cosa fuera la maza sin cante

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"Precisamente porque soñamos, tenemos derecho a la utopía; y la vida carece de sentido cuando no la vivimos persiguiendo el sueño"

domingo, 21 de abril de 2013

Lunes 22 de abril de 2013





Hermanos:

Ayer sábado fue la Asamblea Eleccionaria de Foro Ciudadano, un espacio de articulación del movimiento social dominicano, comprometido con hacer realidad un futuro de vida digna para todos los habitantes de esta tierra; así en minúsculas, la tierra dominicana, que aun cuando deseamos ese mismo futuro de vida digna para La Tierra toda, la humildad no nos permite ser tan ambiciosos. 

En la asamblea, el Centro Juan XXIII que es la organización que coordina el Comité de Seguimiento de Foro Ciudadano, presentó su informe del año 2012-2013. Luego se procedió a la elección de 6 organizaciones que ingresan al Comité de Seguimiento elegidas por dos años. Cada año entran seis y salen seis de una matrícula de 12 organizaciones que componen el Comité de Seguimiento. De manera que en cada elección entran seis y permanecen seis hasta que cumplan los dos años. Esa elección y el informe presentado fueron la parte formal de la asamblea, pero lo que nos movía, la consigna detrás de las formalidades, el espíritu de ese cuerpo, el viento que soplaba desde las 122 organizaciones participantes era: "Es tiempo de articular para crear poder social".

En eso andamos. Es necesario que nos articulemos para crear poder social. 

La articulación puede darse a distintos niveles. En el territorio las organizaciones se pueden articular en torno a demandas particulares y muy sentidas de ese territorio. Esa articulación que parte de lo particular a lo general es muy importante y necesaria; pero también existe la otra, la que parte de demandas generales y muy sentidas por los dominicanos. Esas demandas generales pueden llevarnos a una articulación nacional. Ahí están los temas: Educación, salud, vivienda, institucionalidad, energía y medio ambiente. 

Debemos caminar hacia un congreso del pueblo dominicano y que ese congreso produzca una declaración de principios y un documento de posición que nos unifique en torno al momento que vivimos y a los objetivos que perseguimos. Al mismo tiempo, ese congreso debe dejar funcionando comisiones que presenten un plan de trabajo que nos permita lograr los objetivos.


No hay voluntad política para resolver los grandes problemas nacionales. Los políticos están ocupados en sus proyectos personales de corto plazo y así no puede ser. Tenemos un 40% de la población por debajo de la línea de pobreza. Esa realidad no es sostenible. Si no cambiamos esa realidad, en el muy corto plazo será imposible la vida en la isla. Vamos a articularnos para crear poder social que nos permita marcar la diferencia.

Bien, ahora a lo nuestro.

Hoy les traigo a Silvio Rodríguez, enormísimo poeta cubano y cantor. A Silvio hay que leerlo y releerlo. De entrada nunca nos llega por el intelecto. Nos conquista emocionalmente mucho antes de que sepamos de qué habla, mucho antes de que sepamos qué cosa está diciendo. La canción que les traigo se cuela en el intelecto casi al mismo tiempo que nos conquista emocinalmente, pero el intelecto es siempre posterior.  Aquí les dejo a Silvio con una hermosa canción: Quédate.

Que tengan bonita semana.

Mario

Quédate

Cuando este sol se apague
tu partirás de mí
seguiré solo
con mi dolor y llanto,
y llanto

Mi convicción es no querer
ya nunca más porque
la misma historia es otra vez,
y otra vez, y otra vez,
y otra vez

Quédate, quédate
para poder vivir sin llanto,
sin llanto

Cuando me desengañes
no sé si viviré,
porque es muy triste
tener tan solo llanto,
y llanto

Y mil renuncias en el corazón
que implora
que alguna vez alguien se quede
y llora

Quédate, quédate
para poder vivir sin llanto,
sin llanto

Mi convicción es no querer
ya nunca mas porque
la misma historia es otra vez,
y otra vez, y otra vez,
y otra vez

Quédate, quédate
para poder vivir sin llanto,
sin llanto

Quédate,
para poder vivir sin llanto,
sin llanto, sin llanto,
sin llanto...




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"Precisamente porque soñamos, tenemos derecho a la utopía; y la vida carece de sentido cuando no la vivimos persiguiendo el sueño"


domingo, 14 de abril de 2013

Lunes 15 de abril de 2013






Hermanos:

Ayer sábado participé como Centro Juan XXIII representando a Foro Ciudadano en una consulta a la sociedad civil sobre el tema "El mundo que queremos más allá del 2015". Esta es una iniciativa global que trata un poco de ver que ha sucedido con los Objetivos del Milenio que nos dimos en el 2000 y que teníamos como plazo hasta el 2015 para cumplirlos. Además de evaluar ese desempeño la consulta persigue que nos demos una visión del mundo que deseamos más allá de ese 2015.

La posición que llevó Foro Ciudadano y que fue expuesta por Miguel Ceara Hatton de forma magistral puede resumirse como sigue:

Todo esfuerzo por definir un futuro de vida digna no pasará de ser un sueño mientras no se modifiquen las relaciones de poder. El problema no es técnico, es político, es de voluntad. Es necesario que la sociedad se articule y empiece a actuar en bloque, unida. Es necesario que el costo de una mala decisión política sea altísimo para el político que la toma. Tenemos que generar poder ciudadano. Sólo después de tener una sociedad empoderada podemos hablar de objetivos de derechos humanos, de educación, de salud, de vivienda, de sostenibilidad ambiental, en fin, sólo entonces podremos hablar de vida digna.

Como sustento a esa tesis diremos que los objetivos del milenio se seleccionaron de los objetivos que se plantearon los pueblos subsaharianos, es decir, no fueron objetivos que se trazaron Noruega y Dinamarca, no, fueron objetivos que se plantearon los pueblos más atrasados del planeta y nosotros, los dominicanos, nos quemamos en todos; no logramos cumplir ni uno solo de los objetivos del milenio. Hay que decir que eso sucede en un país que casi duplicó su producto interno bruto (PIB) en los doce años que van del 2000 al 2012 (1.8 veces), que tiene tasas de crecimiento anual de su PIB mayor de 5%, que es extraordinaria; y que todo eso lo hizo sin crecimiento de los empleos y  haciendo crecer  la pobreza.

No hay voluntad política y para que la haya se necesita poder ciudadano. Que les cueste una mala decisión. Debemos seguir el camino que nos traza la Coalición Educación Digna (CED). Una lucha enfocada, persistente, organizada, legal, cívica y con métodos que toda la población comprende y apoya. Para el Presidente Leonel Fernández tiene un alto costo político su oposición al reclamo de la CED, tiene también un altísimo costo político la violación de derechos que ocurrió cuando una banda de policías salvajes agredió físicamente a un grupo de ciudadanos que se manifestaban portando sombrillas amarillas.

Poder ciudadano para que los que nos gobiernan, nos gobiernen bien. Ese el camino.

Bien, ahora a lo nuestro.

Hoy les traigo un alma fina de mujer, Carilda Oliver Labra, cubana de Matanzas, octogenaria viviendo con sus gatos con un amor joven en sus veinte, según me han dicho.

Que tengan bonita semana.

Mario

Me desordeno amor.

Me desordeno amor, me desordeno
cuando voy en tu boca, demorada;
y casi sin por qué, casi por nada,
te toco con la punta de mi seno.

Te toco con la punta de mi seno
y con mi soledad desamparada;
y acaso sin estar enamorada;
me desordeno amor, me desordeno.

Y mi suerte de fruta respetada
arde en tu mano lúbrica y turbada
como una mal promesa de veneno;

y aunque quiero besarte arrodillada,
cuando voy en tu boca, demorada;
me desordeno amor, me desordeno.



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"Precisamente porque soñamos, tenemos derecho a la utopía; y la vida carece de sentido cuando no la vivimos persiguiendo el sueño"

domingo, 7 de abril de 2013

Lunes 8 de abril de 2013




Hermanos:



De niño, siempre quiso ser abusado por una mujer mayor.

Se exponía vulnerable en los ambientes de las primas mayores, la Seño de
tercero inolvidable o en el de alguna vecina, que conforme a su acalorada
imaginación había quedado insatisfecha luego de la visita del novio. Todo
un caso.

De nada le valió su carita de mártir, de "sufro, luego existo", de "abúsame
mujer, que no lo cuento a nadie".

Ninguna lo abusó, cuánto recato!!!

Hoy es alguacil de nuestros tribunales, notifica los actos por oficio, vive
en un estudio de escritor de tercera y tiene sexo con la muchacha que le
limpia el estudio los sábados. Todo un caso.

Quienes le han conocido, aseguran que añora aquel abuso.

Bien, ahora a lo nuestro.

He estado tentado a presentar los "Tres alpinos", 

http://www.youtube.com/watch?v=tKRvODmf4wc&feature=share&list=UUOPLcfndBOz93ABsG0yWDcA )  por ser canción propia de jóvenes sufridos; pero quiero cantarles hoy un fragmento de canto de vida y esperanza, como dijo Darío, aquél Rubén que ayer no más decía...


Yo soy aquel que ayer no más decía...

Yo soy aquel que ayer no más decía
el verso azul y la canción profana,
en cuya noche un ruiseñor la había
que era alondra de luz por la mañana.

El dueño fui de mi jardín de sueño,
lleno de rosas y de cisnes vagos;
el dueño de las tórtolas, el dueño
de góndolas y liras en los lagos;

Y muy siglo diez y ocho y muy antiguo
y muy moderno; audaz, cosmopolita;
con Hugo fuerte y con Verlaine ambiguo
y una sed de ilusiones infinita.

Yo supe de dolor desde mi infancia,
mi juventud…¿Fue juventud la mía?
Sus rosas aún me dejan su fragancia…
una fragancia de melancolía.

Que tengan una bonita semana.

Mario

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"Precisamente porque soñamos, tenemos derecho a la utopía; y la vida carece de sentido cuando no la vivimos persiguiendo el sueño"