lunes, 7 de julio de 2008

Fito Páez en concierto II



Hermanos:

La que finaliza ha sido una semana intensa en noticias.

En el ámbito nacional, les comento que al acercarse el juicio político en El Senado contra los miembros de la Cámara de Cuentas de Dominicana, cinco de los nueve miembros renunciaron; más tarde, en pleno juicio, otros tres miembros renunciaron también y al final El Senado destituyó al único que no había renunciado.

Fue una victoria para la sociedad que había exigido activamente la destitución de esos funcionarios. Ganó la democracia.

En el ámbito internacional, el rescate de Ingrid Betancourt fue la noticia más importante de la semana. Las FARC parecen no darse cuenta de que han perdido la batalla política y cuando un ejercito ha perdido la batalla política es un ejercito de opresores, no de liberadores.

Poema de lunes se une al regocijo internacional por la liberación de Ingrid Betancourt.

Si la semana que recién pasada ha tenido esa intensidad, la próxima no se queda atrás. El próximo miércoles, día 9 de Julio, se celebra el día de la Independencia Argentina, el día en que los Diputados firmaron en Tucumán el Acta de Independencia Argentina.

En alguna ocasión relaté que como dominicano guardaba un agradecimiento especial por el pueblo argentino. Una suerte de respeto y admiración a ese hermano mayor que en momentos en que nuestra patria se encontraba invadida por Estados Unidos de Norteamérica, supo izar nuestra bandera y saludarla con una salva de 21 cañonazos.

Eso ocurrió el 13 de Enero de 1920, cuando el Crucero 9 de Julio de la Armada Argentina visitaba los pueblos de Centro América y El Caribe en visitas de cortesía. El protocolo mandaba que al llegar a cada país se saludara el pabellón con una salva de 21 cañonazos. Al llegar a nuestras costa y ante el dilema de a cual pabellón saludar, si al norteamericano que flameaba oficialmente desde 1916 o al dominicano que moraba en los encendidos pechos de los dominicanos; el Capitán de Fragata Francisco Antonio de la Fuente, comandante del 9 de Julio, consultó cablegráficamente y el Presidente Hipólito Yrigoyen le respondió: "Id y saludad al pabellón dominicano" y así lo hizo al entrar al puerto de Santo Domingo, ante la mirada agradecida de la población que se congregó en el puerto, desafiando el estado de sitio impuesto por los invasores norteamericanos.

Mi abuelo, que fue testigo presencial, me lo contaba y no lo olvido.

¡Felicidades argentinos!

Bien, ahora a lo nuestro.

El pasado martes asistí al concierto de Fito Páez en Santo Domingo. ¡Gran argentino!, ¡Gran concierto!

Hoy les traigo un poema de ese gran artista y el enlace a un vídeo con una canción del mismo autor.

Que tengan bonita semana.

Mario



Un vestido y un amor

Te vi…, juntabas margaritas del mantel
Ya sé que te traté bastante mal,
No se si eras un ángel o un rubí
O simplemente te vi.

Te vi…, saliste entre la gente a saludar
Los astros se rieron otra vez,
la llave de mandala se quebró
O simplemente te vi.

Todo lo que diga está de más,
Las luces siempre encienden en el alma
Y cuando me pierdo en la ciudad,
vos ya sabés comprender

Es sólo un rato no más,
Tendría que llorar o salir a matar.
Te vi, te vi, te vi…,
yo no buscaba nadie y te vi.

Te vi…, fumabas unos chinos en Madrid
Hay cosas que te ayudan a vivir
No hacías otra cosa que escribir
Y yo simplemente te vi.

Me fui..., me voy de vez en cuando a algún lugar,
Ya sé, no te hace gracia este país...
Tenías un vestido y un amor...
y yo simplemente te vi.

Todo lo que diga esta de mas,
Las luces siempre encienden en el alma
Y cuando me pierdo en la ciudad,
Vos ya sabés comprender...
es sólo un rato no más,
Tendría que llorar o salir a matar...
Te vi, te vi, te vi...
yo no buscaba nadie y te vi.



Aquí el vídeo con una hermosa canción en homenaje a las madres de la Plaza de Mayo.


1 comentario:

Argénida Romero dijo...

Dios! fui al concierto también y es precisamente esta canción una dem mis preferidas. Lloré cuando la cantó.

Abrazos