domingo, 12 de abril de 2009

Lunes 6 de abril de 2009





Hermanos:

Llegó abril, plena primavera y en mi tierra es mes de revueltas sociales, pobladas y guerras patrias. Parece que la primavera nos da con explotar ante tanta iniquidad. Los reclamos de hoy son el resultado de la opulencia del primer mundo, que lo tenemos entre nosotros y el contraste con las carencias del mundo de pobreza extrema que también lo tenemos presente. Al mismo tiempo, un gobierno en donde la corrupcón se pasea impune, le añade un ingrediente explosivo a la mezcla.

Abril es el mes más cantado por los poetas: "acuerdate de abril..." dice Amaury, "...el diez de abril de cada año" dice Solano, "...todas las cosas ciertas abrieron una puerta en el centro de abril" pregona Silvio. Entre nosotros es la trinchera del honor y el dolor de la mayor matanza de dominicanos en tiempos de paz que recuerda la historia, a juicio de Don Juan.

Cuidémonos de abril.

Hoy les traigo Borges con dos poemas filosóficos.

Que tengan bonita semana.

Mario


Ajedrez

En su grave rincón, los jugadores
rigen las lentas piezas. El tablero
los demora hasta el alba en su severo
ámbito en que se odian dos colores.

Adentro irradian mágicos rigores
las formas: torre homérica, ligero
caballo, armada reina, rey postrero,
oblicuo alfil y peones agresores.

Cuando los jugadores se hayan ido,
cuando el tiempo los haya consumido,
ciertamente no habrá cesado el rito.

En el Oriente se encendió esta guerra
cuyo anfiteatro es hoy toda la tierra.
Como el otro, este juego es infinito.

II
Tenue rey, sesgo alfil, encarnizada
reina, torre directa y peón ladino
sobre lo negro y blanco del camino
buscan y libran su batalla armada.

No saben que la mano señalada
del jugador gobierna su destino,
no saben que un rigor adamantino
sujeta su albedrío y su jornada.

También el jugador es prisionero
(la sentencia es de Omar) de otro tablero
de negras noches y blancos días.

Dios mueve al jugador, y éste, la pieza.
¿Qué Dios detrás de Dios la trama empieza
de polvo y tiempo y sueño y agonías?



Para una versión del I Ching

El porvenir es tan irrevocable
como el rigido ayer. No hay una cosa
que no sea una letra silenciosa
de la eterna escritura indescifrable
cuyo libro es el tiempo. Quien se aleja
de su casa ya ha vuelto. Nuestra vida
es la senda futura y recorrida.

El rigor ha tejido la madeja.

No te arredres. La ergástula es oscura,
la firme trama es de incesante hierro,
pero en algun recodo de tu encierro
puede haber una luz, una hendidura.

El camino es fatal como una flecha.
Pero en las grietas está Dios, que acecha.

Jorge Luis Borges

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