domingo, 25 de diciembre de 2011

Lunes 26 de diciembre de 2011

Hermanos:

Mañana me voy con la familia en un crucero por las islas del Caribe hasta el próximo lunes día 2 de enero de 2012. De manera que es muy probable que la próxima entrega de poema de lunes llegue el mismo lunes y no el domingo anterior como es costumbre. Este año tendremos una celebración marina del aniversario de bodas, mañana 26, y el próximo martes 27 de diciembre celebraremos en la  alta mar mi cumpleaños número 56. Se prevé día soleado con una mar tranquila para esos días de fiesta.

Era navidad y Patricia y yo caminábamos hacia el estacionamiento del centro comercial luego de comprar algunos regalos en las tiendas. Para llegar teníamos que pasar entre dos vehículos estacionados que dejaban un paso angosto que apenas permitía una persona. Al llegar a nuestro extremo del paso me percaté de que en el otro extremo un caballero también intentaba acceder al paso. Nos miramos, y ambos nos concedimos mutuamente el privilegio de cruzar primero. Él insistió, y yo, sabiéndome más viejo y caminando con Patricia, acepté de buena gana. Al pasar a su lado le dije: Gracias caballero, muy amable. Él me respondió: Feliz Navidad.

Cuánto necesitamos esa actitud cívica que persigue decirle al otro que no está solo. Esos "buenos días", "que tengas una bonita noche", "qué linda estás, te quiero, menos mal que te quiero...". Benedetti  incluido. Esas palabras mágicas cambian el mundo. Hagan ustedes mismos la prueba. Como se trata de una prueba sin el rigor de la academia, vamos a ponerla fácil: Elija cualquier cajero o cajera según su corazón. Los cajeros como sujetos de este estudio son importantes porque están sentados frente a usted y no tienen la posibilidad de huir ante un ataque de buenos días de corazón intenso. Una vez elegido el cajero o la cajera, según su corazón, dígale, poniendo su verdad más profunda en la palabra: "Que tengas una bonita mañana". No se pierda el momento en que levanta la vista y le mira, a usted, a los ojos. Esas palabras mágicas cambian el mundo.

Por lo que a mi me toca, el regalo de Navidad de 2011 que llevaré conmigo, me lo hizo un desconocido, que al cruzar un paso angosto me dijo: Feliz Navidad.

Nunca pensé que llegaría a colocar a José Luis Perales en estos poemas de lunes. No por nada especial sino porque nunca me ha calado. Pero hoy al levantarme para ir a misa me puse un collar de cuentecitas que usan los guerreros Bantues y que tengo desde mi viaje a Nairobi en el 2003. Patricia me lo mandó a quitar inmediatamente y mi hijo Marcos me dijo que no me darían la comunión si trataba de comulgar con ese collar. En todo eso pensaba mientras comulgaba, y el coro cantaba Navidad, de José Luis Perales.

Feliz Navidad y que tengan una bonita semana.

Mario
www.poemadelunes.blogspot.com
www.quijoteurbano.blogspot.com


Navidad

Mientras haya en la tierra un niño feliz,
mientra haya una hoguera para compartir,
mientras haya una manos que trabajen en paz,
mientras brille una estrella, habrá navidad.

Navidad, Navidad en la nieve y la arena
Navidad, Navidad, en la tierra y el mar.

Mientras haya unos labios que hablen de amor,
mientra haya unas manos cuidando una flor,
mientra haya un futuro hacia donde mirar,
mientras haya ternura, habrá Navidad.

Navidad, Navidad en la nieve y la arena
Navidad, Navidad, en la tierra y el mar.

Mientras haya un vencido dispuesto a olvidar,
mientra haya un caído a quien levantar,
mientras paren la guerra y se duerma un cañon,
mientras cure un herido, habrá Navidad.

Navidad, Navidad en la nieve y la arena
Navidad, Navidad, en la tierra y el mar.

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