Hermanos:
La semana que acaba de terminar ha sido particularmente intensa en el muy grato oficio de quijoteurbano. Me la he pasado ayudando a deshacer entuertos, luchando con gigantes o molinos, que como ocurre a veces, desde esta perspectiva no está claro si son aspas o brazos los que agitan los vientos.
En ese orden de ideas hay cuatro iniciativas en las que estamos participando junto a mucha gente buena.
La primera se refiere a una serie de encuentros y acciones de articulación de la sociedad civil para posicionarnos ante la nueva realidad surgida del pasado proceso electoral, realidad que presenta a un partido de gobierno sin oposición. El contrapeso a ese gobierno tiene que ponerlo la sociedad civil.
La segunda iniciativa se refiere a una propuesta que, de implementarse, permitiría convertir la deuda que el Estado Dominicano tiene con Estados amigos, en ayuda a Haití, vía bienes y servicios de origen dominicano aportados a la hermana República de Haití.
La tercera iniciativa se refiere a la Estratebia Nacional de Desarrollo. Este es un esfuerzo de origen oficial que busca lograr consenso en una estrategia nacional de desarrollo para los próximos 20 años. Actualmente está en proceso de consulta y es una muy buena oportunidad para que las organizaciones de la sociedad civil hagan incidencia.
Por último, convencidos de que el proyecto República Dominicana no es viable sin una justicia robusta e independiente, estamos encaminando acciones para incidir en que las nuevas autoridades del sector justicia sean electas con apego a la ley de carrera judicial. Es lo mínimo que se puede exigir para desarticular medianamente la relación comerciante-cliente que nuestros políticos han establecido tan eficientemente. Debemos llevarlos a su propia legalidad: Que se cumpla la ley de carrera judicial.
Como ven, la semana ha sido intensa: Ruedas de prensa, comunicados, entrevistas, radio, televisión..., lo que falta ahora es mantener la presión colectiva en el intento.
Ahora a lo nuestro.
Hoy les traigo a Pedro Lezcano, poeta canario, con un soneto irreverente lleno de vida que se hizo presente en la última tertulia del Vizcaya.
Que tengan bonita semana.
Mario
www.poemadelunes.blogspot.com
www.quijoteurbano.blogspot.com
Soneto Irreverente
Señor: Pero no ves que me marchita
este vivir sin grito y sin errata,
que pereceré ahorcado en al corbata,
mudo en la silla vil de la visita.
Que esta cláusula eterna, esta maldita
pauta de seriedad me maniata,
que mi sangre, encharcada de sensata,
en un pozo de hiel se precipita.
Acaba ya, Señor, este divino
cuadro para el que sirvo de modelo
Acaba y paga y cámbiame el destino.
Págame, sí, mi sueldo que me hielo.
Págamelo en locura, en sangre, en vino,
en libertad, en flor, en canto, en vuelo.
Pedro Lezcano
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